Sobre el poder, cosas que escuchamos sin querer queriendo y por qué leemos.
Así es la dictadura
Tengo una lista de libros que me gustaría sumar a mi biblioteca tarde o temprano. La fecha apremiaba y no logré conseguir un ejemplar de Así es la dictadura, pero encontré esta narración que me catapultó a mi niñez donde pedía que me lean pentos sin parar (aprovecho para contarte que después de mamá y papá, mi tercer palabra fue la adaptación de cuento: pento).
El libro del que te voy a hablar hoy pertenece a la colección Libros para mañana, de la editorial Media Vaca, donde también se encuentra Hay clases sociales (del que escribí en la cuarta edición de Parsimonia). Si tenemos en cuenta que la primera edición de este texto se hizo pública en plena transición a la democracia después de la cruenta dictadura franquista, todo toma otro color. Hay que ser valiente para publicar estas ideas, pero en igual medida hay que ser consciente del poder transformador que pueden tener las narraciones en las infancias.
La edición de 2016 fue ilustrada por Mikel Casal y adaptado de la edición de los setentas por el equipo Plantel. Condensa, desde la gráfica, lo ilógico de los gobiernos autoritarios. Pero hay un detalle importante que el equipo mismo plantea: no hay que confiarse porque las dictaduras siguen siendo hoy una forma de gobierno presente en muchos países.
Quiero aprovechar este libro para niños –y no tanto– que trata sobre política para plantar mi bandera respecto de algo que considero esencial, y para ello me voy a valer de las palabras de Vicente Ferrer, uno de los cofundadores de la editorial:
La manía de poner edad a los libros tiene que ver, tal como yo lo entiendo, con dos prejuicios que afectan al uso de las imágenes: el que considera que las ilustraciones son una apoyatura para aquellos que todavía no se han familiarizado con las palabras, y el que dice que una vez que se domina la lectura de textos escritos, las imágenes ya no hacen ninguna falta. De esta forma se aparta al niño del libro del nivel superior, y se aparta al joven y al adulto de los libros que pertenecen, por así decirlo, a niveles inferiores: ningún adulto volverá a leer un libro infantil o un libro con ilustraciones porque pertenecen a una etapa superada. Sin embargo, el libro no conoce edades: no es sino de quien lo disfruta, de quien lo hace suyo.
Es complejo sintetizar este tipo de temas en imágenes. Y ahí está parte de la magia, no subestimar a quien los observa. Durante muchos años miré con desdén el sector de las librerías destinado a los niños. Hoy en día es el primer lugar al que voy. Quién sabe, quizás le estoy devolviendo esos años de imágenes perdidas a esa Macarena que aprendió a leer los libros “con palabras” muy temprano.
Comentarios en el MOMA
Todavía no conozco Nueva York y eso quiere decir que todavía no conozco su Museo de Arte Moderno (MoMA para los amigos). Pero resulta que ahora tiene una sede más, así que no sólo tengo por conocer las obras del de Manhattan sino también las que están en el de Queens. ¿A qué viene todo esto? Bueno, es que me encontré con este precioso sitio interactivo hecho por el New York Times, escrito por Larry Buchanan e ilustrado por Cari Vander, quienes aprovecharon la apertura de esta nueva sede para meternos un poco en la experiencia de recorrer un museo.
Siempre me genera mucha admiración cuando logran tanto con semejante economía de recursos: líneas negras, aparentemente desenfadadas y simples. Pareciera que podríamos hacerlo nosotros ¿no? Pero si tratamos, nos damos cuenta al minuto que lograr transmitir tanto con tan poco es muy, muy difícil. Te invito también a recorrer el sitio de Cari y encontrarte con miles de joyitas, ¡incluso algunas animadas!
Volviendo sobre este proyecto, me encantó porque ilustraron típicos comentarios que escucharíamos: “¿Eso es arte? ¡Pero si podría hacerlo yo!” (spoiler: no), “¿Ya pasamos por acá?” o “¡Sacame una foto frente a esta obra!”. También mostraron la diversidad de edades de quienes lo visitan y diferentes maneras de pensarlo o recorrerlo. El mejor museo que podríamos pedir es el que se vive y se disfruta, y es lo que lograron retratar Cari y Larry. Bravo por ellos.
P. D. Si entras desde la compu, siempre podes hacer click derecho en cualquier lugar de la página y traducirla a español así lo podes disfrutar en nuestro idioma.
P. D. 2: Como las casualidades existen en esta vida, una amiga me pasó, sin saber que en esta edición iba a hablar del MoMA, este proyecto de la agencia de diseño Gretel NY donde lograron trasladar visualmente las nuevas exhibiciones por medio de animaciones simples pero poderosas.
Por qué leer
Un par de ediciones atrás te conté que amo las listas. Y haciendo un poco de investigación para el primer artículo de este newsletter, encontré esta de Vicente Ferrer que me pareció sencillamente exquisita. Voy a atreverme a copiar algunas razones de ¿Por qué leer?:
[...]
5. Para encontrarme a mí mismo
6. Para encontrarme con los demás
7. Para huir de los demás
[...]
9. Por envidia. Escuchaba a alguien que utilizaba una palabra que yo no había oído e instantáneamente la quería para mí. Me preguntaba: ¿cómo sabrá eso? ¿será porque lee?
[...]
15. Porque soy demasiado cobarde para vivir una vida de peligros
[...]
20. Para aprender a escribir. ¿Cómo han dicho otros aquello que yo quiero decir?
21. Para no tener que escribir. Si descubro que otros ya lo han dicho bien, ¿para qué repetirlo?
[...]
23. Para aprender a mentir y regalar al mundo las mentiras mejores
24. Para conocer la verdad. Con la esperanza además de que exista una última verdad tranquilizadora
[...]
30. Por inercia. Aprendiste a leer, leíste y leerás. También las pancartas en las manifestaciones y los mensajes que la gente adhiere a los troncos de los árboles
[...]
37. ¿Por qué no?
[...]
42. Por vicio. Es una manía que adquirí y no he podido corregir
Acá tienen la lista completa. Por si fuera poco, está ilustrada por un ex libris hecho por Alejandra Hidalgo en 2003 para una pareja de lectores: Ludek y Karolina.
En qué ando
Leyendo
Estoy por comenzar La hora de la estrella de Clarice Lispector. Hace mucho tiempo tengo ganas de leerla a esta autora y estoy entusiasmada.
Escuchando
El soundrack de La la land. No soy de escuchar las bandas de sonido de pelis pero esta me parece ideal para trabajar y concentrarte.
Viendo
El proceso increíble de Tom Thinks. Este ilustrador usa sus huellas dactilares para generar un efecto literalmente único. Sus retratos son espectaculares.
Hasta la próxima
Hola, ¿cómo estás? Esta semana somos más en este newsletter porque Axel me mencionó en Observando. Espero que la reseña del Moma le haya hecho justicia al link que te trajo hasta acá :)
Yo ando medio reflexiva porque la semana pasada tuve malas noticias: una de las mejores amigas de mis padres, esas personas que se convierten en familia, tuvo un problema médico grave. Y me tiene desde entonces pensando sobre lo rápido que la vida se puede complicar y lo fácil que es por momentos olvidarnos de la fortuna de tener salud. Creo que estamos siempre enfocados en la carrera de todo lo que nos falta conseguir y no logramos darnos cuenta de lo rica que es nuestra vida ahora mismo. Así que si estas pasando un buen momento, disfrutalo mucho, y si te toca estar en la otra vereda, te mando un abrazo fuerte.
Perdón por terminar este mail con este pasaje tan bajón pero me parecía importante traerlo acá. Escribir muchas veces me hace ser consciente de lo que me sucede y saber que estas del otro lado leyendo me hace sentir sumamente agradecida.